Hola viajeros, bienvenidos al capítulo número 5 de esta serie. Ya casi terminamos de descubrir la costa este de Canadá y la aventura ha sido increíble ¿no creen? Sin duda este país te deja con muchas, muchas ganas de volver y de seguir conociendo todos sus rincones.

En este episodio decidí incluir tres pueblitos que están muy cerca entre sí y que, a pesar de ser pequeños, cada uno tiene algo especial que hace de tu visita una experiencia muy interesante, divertida e inolvidable. Puedes combinarlos u ordenarlos de la manera en que mejor te convenga de acuerdo con tus tiempos y con el lugar en donde estés haciendo base. Por ejemplo, yo me encontraba en Cornwall, visitando a unos amigos muy queridos y contaba con el suficiente tiempo para dedicarle un día entero a cada pueblo. Pero si tu estadía es mas corta, te recomiendo combinar Brockville y Cornwall y dejar para otro día Mont Tremblant, que es el más alejado. Pues no perdamos más tiempo y vámonos a descubrir que tienen de especial estos tres destinos.

Quizás Brockville no te sea muy “sonado” sin embargo, recibe muchos visitantes al año ya que es el poblado más cercano a Rockport, el muelle desde donde zarpan los botes para ir a recorrer las Mil Islas. Seguro que eso de “Las Mil Islas” sí te suena más familiar ¿verdad?

Mil Islas es un archipiélago de 1864 islas, la mayoría de dimensiones pequeñas, desperdigadas sobre el Rio San Lorenzo, el cual comparte fronteras con Canadá y Estados Unidos. Debido a esto, algunas islas son propiedad de USA y otras son territorio canadiense. El paseo es una experiencia increíble, ya que te encontrarás con paisajes que difícilmente podrías captar en otro lugar. Durante el recorrido podrás ver auténticos castillos asentados en su propia isla, mansiones y residencias impresionantes construidas en islas privadas, así como pequeñas cabañas o casitas estilo chalé, edificadas en diminutas porciones de tierra. También hay otras islas de mayor tamaño en donde hay villitas o poblados muy pequeñitos. Este contraste de estilos, formas y tamaños, hace que las vistas sean algo muy peculiar y a la vez muy hermoso.

Algunas de las islas mas interesantes son la denominada Just Room Enough un islote diminuto en el que solo cabe una pequeña casa y un árbol, sin duda un pedazo de tierra muy pintoresco. Otra, es la isla Zavikon, que en realidad son dos islas pequeñas conectadas por un puente. Estas porciones de tierra han sido disputadas entre USA y Canadá, por lo que dicho puente se considera el puente internacional más corto del mundo. Y por último, la más hermosa de todas, Heart Island, en donde se encuentra el espectacular Castillo Boldt. Este bello castillo fue construido por George Boldt como regalo para su esposa Louise. Lamentablemente, la señora falleció un año antes de haber sido terminadas las obras de construcción y nunca pudo disfrutar de él. Se dice que el Señor Boldt quedó tan devastado por la perdida de su mujer, que nunca volvió y el castillo quedo abandonado por mas de 70 años. Tiempo más tarde, las autoridades de USA adquirieron la propiedad, la restauraron y debido a su trágica historia, algunos la llaman la isla más romántica del mundo. De hecho, no es raro que sea escenario de bodas y eventos especiales. Claro, para quienes pueden costear la renta de las instalaciones, pues estamos hablando de un verdadero castillo de 6 pisos, 120 habitaciones, jardines al estilo italiano y hasta pasadizos secretos.

Volviendo al tema del barco, es importante que sepas que hay varios tipos de recorridos y que algunos incluso, te permiten bajar a algunas de las islas, como Heart Island, para visitarlas. La duración y el precio varía dependiendo de la compañía con la que contrates el servicio y si el recorrido incluye paradas o no. 

Por ejemplo, están los barcos cruceros en donde puedes contratar un paseo con comida o cena. Estos barcos cuentan con un área comedor donde podrás consumir tus alimentos mientras te deleitas con las vistas. Otros, son los botes panorámicos de dos o tres pisos con espacios abiertos, que únicamente dan un paseo sobre el rio para que puedas admirar las islas, pero no atracan en ninguna de ellas. Y por último, están los recorridos más largos que incluye el desembarco en algunas islas.

Ten en cuenta que como ya te mencioné, algunas islas son propiedad de USA, por lo que para visitarlas deberás contar con la documentación necesaria conforme a tu nacionalidad. Sea cual sea la opción que elijas, estoy segura de que la visita a Mil Islas, no te decepcionará en ningún sentido. Es un sitio muy especial, con vistas maravillosas y un encanto muy particular.

Una vez que terminamos con el recorrido en barco, fuimos a conocer el lindo pueblecito de Brockville, cuya calle principal me fascinó. En realidad, se trata de una ciudad, pero su centro tiene esencia de pueblo, ya que es uno de los asentamientos europeos más antiguos de la región. La encantadora calle principal King Street está repleta de cafés, restaurantes y tiendas para curiosear y andar con calma si es clima es agradable. Otros puntos de interés en el centro son el City Hall, la Court House y algunas Iglesias que verás por allí, ya que sus fachadas son muy lindas y fotogénicas.

Otro lugar al que no puedes dejar de ir es al antiguo túnel ferroviario, el cual data del año 1854, sin embargo, desde el 2017 fue abierto al público y hoy en día es una experiencia de luz y sonido bastante entretenida e instagrameable. Mantén activada la cámara y video mientras caminas el túnel con sus cambiantes colores, formas y sonidos. Si dispones de más tiempo puedes visitar el Museo de la ciudad, el Acuario o la Mansión Fulford Place, una casa histórica transformada en museo. También puedes dar una caminata por algunos de sus parques o callecitas, o simplemente pasear por el waterfront para admirar las vistas hacia el río.

Cabe mencionar que algunas personas eligen el embarcadero de Kingston en lugar del de  Rockport en Brockville, para abordar el crucero a las Mil Islas. Esta ciudad está un poco más retirada, no obstante, también es una alternativa genial si deseas conocer Kingston, ya que tiene varios atractivos para ver y es una ciudad estudiantil con buen ambiente y varias opciones de entretenimiento.

Ahora es turno de ir a explorar Cornwall, una pequeña población fronteriza a orillas del rio San Lorenzo. Es una localidad muy linda, tranquila y acogedora donde pasamos unos días maravillosos en compañía de nuestros amigos.

Estar aquí nos dio la oportunidad de sentir el autentico ambiente local y ser parte del día a día de una familia canadiense. A través de horas y horas de platica, pudimos conocer más sobre el estilo de vida en este país y sus costumbres, así como de las bondades, dificultades y cambios en la rutina cotidiana conforme a la estación del año en que se encuentren.

Una visita muy recomendada mientras estás aquí es Upper Canada Village, un parque patrimonial que es un auténtico viaje en el tiempo. Sentirás que te transportas al pasado mientras recorres esta fiel recreación de un pueblo del siglo XIX. En esta especie de museo al aire libre, podrás aprender sobre la forma de vida de los habitantes de aquella época, así como la historia, desarrollo y evolución de estas civilizaciones.

Cada casa o local fue construido con mucho detalle y esmero para verse lo más original posible, por lo que podrás entrar a la casa del herrero, del panadero, del doctor, del granjero, del zapatero, de las hiladoras y otras más, así como a la iglesia, la escuela, la botica, los establos, la taberna, la maderería, los molinos, entre otros comercios. Y no solo eso, en cada uno podrás interactuar con los personajes, los cuales desarrollan muy bien su papel y además están perfectamente caracterizados con vestimenta e indumentaria de la época, lo que hace la experiencia más real y entretenida. Es una actividad muy amena en donde la pasarán bien chicos y grandes.

Recorrer el lugar te tomará buena parte de la mañana, así que cuando termines puedes volver al centro de Cornwall, el cual no te tomará mucho tiempo conocer. Te aconsejo dar una caminata por sus parques, degustar la gastronomía local o relajarte en algún sitio a orillas del rio. Aprovecha para disfrutar de un poco de paz, respirar el aire puro y desconectarte del ajetreo y el bullicio de las grandes ciudades.

Por último, vamos a hablar sobre un precioso lugar llamado Mont Tremblant. Este condado es más conocido por ser un centro de esquí y uno de los destinos vacacionales más demandados durante el invierno. Sin embargo, también tiene mucho que ofrecer a sus visitantes durante el verano, por lo que es una escapada perfecta sin importar la época del año. El pintoresco centrito, tiene todo el aspecto de una villa, así que puedo imaginarme lo linda que se ha de ver durante la temporada decembrina, cubierta de nieve y con la decoración navideña.

La villa de Mont Tremblant básicamente está formado por coloridos hoteles y resorts, tiendas, cafés, restaurantes y locales donde hay varias actividades para toda la familia. Si lo visitas durante el verano como yo, no dudes en subir a la góndola, desde donde tendrás unas panorámicas espectaculares. Como ya lo hemos dicho, la belleza de los paisajes de Canadá es indiscutible. Otra de las actividades que más disfrutamos fue la pista de carritos sin motor, cuya velocidad es impulsada por la altura e inclinación de la colina mientras vas descendiendo. Hay varias opciones de entretenimiento y ocio para elegir, así que no te preocupes, que aquí la diversión está garantizada para que tú y tu familia pasen un día fantástico.

Espero que te haya gustado este nuevo capítulo. Recuerda que si estás planeando viajar a Canadá, puedes checar la sección de RESERVA TU VIAJE para revisar los paquetes que tengo a este y otros destinos. O puedes contactarme y a través de mi Agencia de Viajes Inspiration Travel con mucho gusto te apoyaré con toda la planificación de tu próxima aventura. Recuerda seguirme en mis redes sociales para ver más fotos y videos de este y otros viajes y lo más importante, gracias por acompañarme en un episodio más en busca de inspiración. Nos vemos en la próxima.